Conclusiones clave
La ansiedad por separación afecta al 14-20 % de todos los perros, lo que la convierte en uno de los trastornos de comportamiento más comunes en las mascotas.
Las razas de pastoreo y los perros de compañía tienen un mayor riesgo genético de ansiedad por separación en comparación con las razas independientes.
Los perros de rescate son dos veces más propensos a desarrollar ansiedad por separación debido a traumas o inestabilidad pasados.
Muchos dueños de mascotas confunden la ansiedad por separación con el aburrimiento, lo que conduce a un entrenamiento ineficaz.
Los perros forman vínculos emocionales similares a los niños pequeños humanos, con escáneres cerebrales que muestran actividad en las mismas regiones asociadas con el amor y el apego.
El entrenamiento de desensibilización estructurado reduce significativamente los comportamientos relacionados con la ansiedad en los perros, y muchos muestran una mejora a largo plazo.
Navegación rápida
¿Qué es la ansiedad por separación en los perros?
Ansiedad por separación frente a aburrimiento: cómo distinguirlos

¿Qué tan común es la ansiedad por separación en los perros?
🔹 Los perros que han experimentado cambios repentinos en su estilo de vida (como un nuevo hogar, un nuevo miembro de la familia o un cambio en la rutina) corren un mayor riesgo.
¿Por qué ocurre la ansiedad por separación?
La ciencia detrás del apego canino
🔹 Los perros dependen de sus dueños para su seguridad emocional, algunos más que otros, dependiendo de la genética y la crianza.
Predisposición genética: ¿algunos perros nacen más ansiosos?
Labradores y Golden Retrievers: fuertes lazos familiares, no les gusta que los dejen solos.
Pastores alemanes y border collies: perros de trabajo con mucha energía que no pueden estar sin hacer nada.
Jack Russell terriers y beagles: criados originalmente para cazar en manada, no toleran bien el aislamiento.
Lebreles italianos y cavalier king charles spaniel: perros falderos muy cariñosos con un apego intenso.
Chow Chow y Shar Pei: independientes y menos dependientes emocionalmente de los humanos.
Basset Hound y Bloodhound: personalidades tranquilas, se adaptan bien al tiempo a solas.
Lebrel afgano y Malamute de Alaska: más autosuficientes en comparación con otras razas.
Desencadenantes ambientales: cómo las experiencias tempranas moldean la ansiedad en los perros
Separación temprana de la madre y la camada: los cachorros que se separan demasiado pronto (antes de las 8 semanas) suelen tener problemas de independencia más adelante.
Historial de reubicación y refugio: los perros que han sido abandonados, reubicados o que han estado en un refugio suelen tener niveles de ansiedad más altos.
Cambios repentinos en la rutina: un cambio drástico (como un nuevo horario de trabajo, una mudanza o la marcha de un miembro de la familia) puede desencadenar un estrés relacionado con la separación.
Apego excesivo a los dueños: los perros que tienen acceso constante a sus dueños (cachorros de pandemia, por ejemplo) tienen más dificultades cuando se quedan solos más tarde.

Signos comunes de ansiedad por separación
1. Comportamiento destructivo centrado en escapar
Arañar o morder puertas y ventanas en un intento de seguir a su dueño.
Cavar en el suelo cerca de las salidas.
Escapar de las jaulas, lo que a menudo provoca lesiones como uñas o dientes rotos.
2. Ladridos, aullidos y quejidos excesivos
Vocalización ininterrumpida que dura horas después de que el dueño se va.
Los ladridos no son provocados por ruidos externos, sino que son una respuesta a estar solo.
Los vecinos pueden quejarse de los ladridos fuertes y continuos.
3. Orinar y defecar en el interior (incluso cuando está entrenado para hacerlo en casa)
Los accidentes ocurren justo después de que te vayas, no al azar a lo largo del día.
La orina o la caca pueden esparcirse por la casa, en lugar de quedar en un solo lugar.
El perro puede tener accidentes solo cuando está solo, pero nunca cuando el dueño está en casa.
4. Deambular e inquietud
Caminar repetidamente en círculos o por un camino fijo (por ejemplo, de un lado a otro cerca de la puerta).
Ocurre solo cuando el dueño no está; el perro está más tranquilo cuando está en casa.
Puede provocar agotamiento y lesiones en las patas por el movimiento excesivo.
5. Babeo, jadeo y autolesiones excesivos
Charcos de baba cerca de puertas, jaulas o ventanas.
Jadeo excesivo, incluso en temperaturas normales.
Lamerse o morderse las patas hasta el punto de irritarse o lesionarse.
6. Reacciones extremas cuando te vas y vuelves
Antes de irte: El perro se agita cuando nota señales de partida (por ejemplo, coger las llaves, ponerse los zapatos).
Al volver: El perro te saluda con un entusiasmo excesivo: saltando, gimiendo, incluso orinando para aliviar el estrés.
Tarda mucho tiempo en calmarse después de que llegas a casa.

Mitos y conceptos erróneos sobre la ansiedad por separación en perros
Mito 1: Los perros superarán la ansiedad por separación con la edad
Los perros no «superan» la ansiedad con la edad. En cambio, sus niveles de estrés pueden aumentar, lo que conduce a comportamientos más graves como autolesiones, vocalización excesiva o destrucción.
Mito 2: «Conseguir otro perro lo arreglará»
Un segundo perro puede proporcionar compañía, pero si la angustia del perro ansioso está relacionada con la marcha de su dueño, otra mascota no solucionará el problema subyacente. Muchos perros con ansiedad por separación siguen entrando en pánico cuando se quedan sin su humano, incluso si hay otro perro presente.
Mito 3: «Si mi perro es destructivo, debe tener ansiedad por separación»
Algunos perros muerden muebles, cavan o destrozan objetos porque están aburridos, desestimulados o no están bien adiestrados. Como te mostramos antes, la diferencia clave es que los perros con ansiedad por separación centran su destrucción en los puntos de escape (puertas, ventanas, jaulas). Los perros aburridos muerden objetos al azar (zapatos, almohadas, sofás, basura).
Mito 4: «Solo castiga el comportamiento y se detendrá».
Los perros que sufren ansiedad por separación no están desobedeciendo, están angustiados. Gritar, regañar o encerrar como castigo no detendrá el comportamiento; en cambio, puede aumentar el miedo y el pánico.
Mito 5: «La ansiedad por separación solo les pasa a los perros rescatados»
Aunque los perros de refugio tienen un mayor riesgo, los perros criados en hogares cariñosos también pueden desarrollar ansiedad por separación.

Cómo solucionar la ansiedad por separación en perros: entrenamiento paso a paso
1. Desensibilización gradual (aumentar poco a poco el tiempo que pasa solo)
Empieza poco a poco: Deja a tu perro solo durante unos segundos: sal por la puerta y vuelve antes de que entre en pánico. Recompénsalo por mantener la calma.
Aumenta gradualmente el tiempo que está solo: Alarga lentamente tus ausencias unos minutos cada vez durante varios días o semanas.
Vuelve con calma: Espera a que tu perro esté relajado antes de prestarle atención.
Usa un espacio seguro: Empieza a entrenar en un área donde tu perro se sienta cómodo (por ejemplo, una jaula acogedora o un lugar de relajación designado).
Controla las señales de estrés: si tu perro empieza a mostrar signos de angustia (lloriqueo, paseo), ralentiza el proceso; las prisas pueden empeorar la ansiedad.
2. Contracondicionamiento: haz que el tiempo a solas sea positivo
Usa golosinas especiales o juguetes de rompecabezas solo cuando te vayas: las golosinas de alto valor deben reservarse para el tiempo a solas, haciendo que tu partida sea algo que esperen con ansias.
Pon música relajante o ruido blanco: la música clásica suave, los audiolibros o incluso las máquinas de ruido blanco pueden ayudar a enmascarar los sonidos externos y crear un ambiente más relajante para tu perro.
Usa un aroma reconfortante: deja cerca un objeto con tu olor, como una camiseta o una manta usada, para proporcionar un olor familiar y tranquilizador mientras estás fuera.
3. Rutina previa a la salida: Reduce la ansiedad de la salida
Haz que las señales de partida no tengan sentido: coge las llaves y siéntate en lugar de irte. Ponte los zapatos por la casa durante un rato. Mezcla tu rutina para que estas señales no siempre conduzcan a la separación
Dale una distracción antes de irte: un rompecabezas de comida, un juguete para masticar o un dulce congelado pueden redirigir su atención cuando salgas.
Mantén la calma al irte y al volver: nada de despedidas emocionales, nada de saludos exagerados. Actúa como si irte y volver fueran acontecimientos normales y cotidianos.
Cómo el comportamiento del dueño puede reforzar la ansiedad
Hacer un drama de la partida («¡Lo siento mucho, volveré pronto!») = Aumenta la ansiedad.
Dejar que tu perro te siga a todas partes en casa = Crea una dependencia excesiva.
Castigar al perro por comportamientos relacionados con la ansiedad = Lo asusta más.
Correr inmediatamente a consolar a un perro que llora al volver = Refuerza el comportamiento de pánico.
Si la ansiedad por separación de tu perro es grave (se lesiona, aúlla durante horas, se escapa de las jaulas), puede ser necesaria la intervención de un profesional.
Entrenadores caninos certificados: especializados en modificación de la conducta centrada en la ansiedad.
Comportamentalistas veterinarios: pueden recetar medicamentos (solo si es necesario) para aliviar casos extremos.
Los mejores productos y tecnología para la ansiedad por separación
1. Cámaras para mascotas con audio bidireccional 🎥
Te permite comprobar si tu perro se está calmando o muestra signos de angustia.
El audio bidireccional te permite hablar con tu perro, lo que puede ayudar a algunos perros a sentirse más tranquilos.
Las cámaras que dispensan golosinas recompensan el comportamiento tranquilo, reforzando las experiencias positivas en solitario.
2. Máquinas de ruido blanco y música relajante 🎵
Imita la presencia de personas proporcionando ruido de fondo.
Reduce la sensibilidad a los desencadenantes externos como el tráfico, los timbres o los vecinos ruidosos.
Se ha demostrado científicamente que ciertas frecuencias de la música clásica relajan a los perros.
3. Chalecos de ansiedad ponderados 🦺
Aplica una presión suave y constante, similar a un abrazo, que tiene un efecto calmante.
Se puede usar antes y durante el entrenamiento en solitario para reducir el estrés.
Funciona mejor cuando se combina con el entrenamiento de desensibilización.
4. Juguetes interactivos y comederos de alimentación lenta 🦴
Proporciona distracciones positivas para desviar la atención de la soledad.
Fomenta la resolución de problemas y la participación en lugar de comportamientos basados en el estrés.
Se puede utilizar para reforzar las asociaciones positivas con el tiempo a solas.
5. Aerosoles calmantes y difusores de feromonas 🌿
Libera feromonas que apaciguan a los perros (DAP) que imitan el olor reconfortante de una madre.
Ayuda a reducir los comportamientos relacionados con el estrés, como caminar de un lado a otro y lloriquear.
Funciona mejor como ayuda complementaria, no como solución independiente.

Reflexiones finales: ¿se puede solucionar la ansiedad por separación para siempre?
Los casos leves pueden mostrar una mejora en unas pocas semanas con un entrenamiento estructurado.
Los casos moderados pueden tardar unos meses de desensibilización constante.
Los casos graves, en los que los perros se lesionan o experimentan una angustia extrema, suelen requerir la intervención de un profesional, como un adiestrador certificado o un veterinario especialista en comportamiento.
Journal of the American Veterinary Medical Association
Veterinary Evidence
National Institutes of Health (NIH)American Veterinary Medical Association (AVMA)
American Society for the Prevention of Cruelty to Animals (ASPCA)
Human-Animal Bond Research Institute (HABRI)
North American Veterinary Community (NAVC)